3 de julio de 2019

Protección solar en niños

Se acerca el verano y el sol empieza a apretar fuerte. Los niños constituyen una población especialmente sensible a los daños solares, ya que sus mecanismos de defensa son menos eficaces,  por eso es muy importante protegerlos. A corto plazo, el sol puede producir quemaduras, y a largo plazo, hiperpigmentación, fotoenvejecimiento y cáncer de piel.


Debemos tener en cuenta que entre el 50-80% de la exposición solar de nuestras vidas ocurre en los primeros 20 años. Los efectos de la radiación ultravioleta son acumulativos e irreversibles. Los estudios científicos demuestran que existe relación entre la exposición a rayos ultravioletas y quemaduras solares, con el riesgo de desarrollar cáncer de piel en la edad adulta. Esto nos tiene que servir para entender la importancia que tiene la fotoprotección en la infancia. Y sobre todo sabiendo que los niños reciben el triple de radiación solar que los adultos.
Esto adquiere mayor relevancia en los niños más pequeños, cuya piel es mas fina, tienen menores niveles de melanina, y por tanto mayor susceptibilidad al sol.

Tipos de radiación ultravioleta
De forma muy simplificada, podemos decir que existen dos tipos de radiaciones ultravioletas: UVA y UVB. Los rayos UVA se asocian más con el fotoenvejecimiento o envejecimiento prematuro de la piel, mientras que los rayos UVB se relacionan con los eritemas y quemaduras solares, y cáncer de piel.
Además, la cantidad de radiación UV que llega a la superficie terrestre varía en función de la horaria del día (mayor radiación entre las 11 y las 16 horas), la estación del año (en verano mayor intensidad), la latitud geográfica (mayor cuando más cerca del ecuador), las nubes y la polución (disminuyen la cantidad de radiación) y la capa de ozono (llega mayor radiación en aquellas zonas con una capa disminuida).


Medidas de protección solar
La fotoprotección tiene como objetivo la prevención del daño que la radiación UV realiza en la piel. Las medidas de fotoprotección son aconsejables a todas las edades, pero en la población infantil y juvenil deben ser más intensas, ya que los niños son más susceptibles que los adultos a las radiaciones UV.  La fotoprotección incluye todas aquellas medidas que se pueden instaurar para proteger la piel de la agresión producida por la exposición solar. Entre las estrategias de fotoprotección más importantes, de acuerdo con las guías nacionales e internacionales, se encuentran:
- Evitar la exposición solar en las horas centrales del día, sobre todo entre las 11 y las 16 horas. Quizá le medida más importante.
- Evitar exposiciones solares prolongadas.
- Buscar sombras o utilizar sombrillas.
- Utilizar ropa de manga larga, gorros de ala ancha y gafas de sol.
- Utilizar cremas con filtros solares.
- Protegerse también en días nublados, porque la radiación UV puede atravesar las nubes
- Protegerse del sol aunque la piel esté bronceada, porque aún así puede quemarse.


La medida más importante consiste en desarrollar comportamientos fotoprotectores saludables evitando o disminuyendo el tiempo de exposición a la radiación solar. Es aconsejable disminuir las actividades al aire libre en los periodos centrales del día, aprovechando los lugares sombreados y evitando la exposición solar intencionada. Es importante recordar que las sombras y los árboles reducen la radiación UV directa, pero no la indirecta emitida por las superficies circundantes, como el agua, la arena o la nieve.  La hierba refleja un 3% de la radiación solar, el agua un 5%, pero la arena seca refleja un 17% y la nieve hasta un 85%.
Una regla que puede ayudar a saber cuándo se debe poner más empeño en evitar el sol, es la regla de la sombra. El sol es más peligroso cuanto más pequeña es la sombra del niño en relación con la altura. El riesgo es menor cuando el tamaño de la sombra es mayor.
Si se va a estar expuesto al sol, es conveniente cubrir la mayor parte del cuerpo posible de las radiaciones solares mediante la utilización de ropa, mejor si esta es de manga larga. Hay tejidos especiales que llevan materiales con protección solar. El factor de protección UV (FPU) es la medida de transmisión de radiación UV a través del tejido, y sería algo similar al factor de protección solar de las cremas (FPS). Por ejemplo, un factor 50 UPF indica que la prenda deja pasar a la piel 1/50 de radiación solar, es decir, un 2% de toda la radiación que llega al tejido. En el etiquetado debemos buscar las siglas FPU, que es un índice de protección estandarizada  a nivel mundial seguido del número que índice el factor de protección.  Las prendas que indican su FPU han sido testadas para conocer cual es la cantidad exacta de radiación solar que consiguen bloquear, siendo necesario presentar estudios que indiquen esta eficacia para poder salir a la venta. Lo ideal sería un FPU 50+.
En cuanto a la ropa tradicional, el nailon, la seda y el poliéster tienen mayor factor de protección que el algodón, la lycra o el lino. Para que os hagáis una idea, una camiseta de algodón protege 12 UPF, y unas medias de lycra, solo 2 UFC. La protección es mayor cuanto menores son los espacios entre los hilos y cuanto mayor es el peso y el grosor del tejido. De forma práctica, podemos hacernos una idea de cuánto sol dejan pasar algunas prendas viendo la consistencia de la sombra que consiguen proyectar sobre el suelo al extenderlas bajo el sol, o bien observando cuanta luz deja pasar a su través la prenda, al extender su tejido estirado contra el cristal de una ventana iluminada por el sol.
Las prendas brillantes, como la seda, reflejan más el sol que las prendas mates. Y los colores oscuros, bloquean más radiación que los claros. También que tener en cuenta que la ropa mojada, pegada al cuerpo, protege menos frente a la radiación solar. ¿Os acordáis de la camiseta de algodón de antes? Puedes húmeda su protección no llega a 8 UPF.
Otra pantalla física importante para la protección de la cara y el cuello son las gorras y los sombreros, cuyo uso es especialmente importante en los niños. Ofrecen mayor protección cuanto mayor sea el área que cubran. También hay algunos materiales con protección solar incorporada. Las gafas de sol protegen los ojos y las regiones perioculares y deben tener filtros solares homologados para esta edad infantil.
También debemos tener en cuenta que los cristales de la ventanas filtran la radiación UVB, pero dejan pasar los UVA y la luz visible.

Si queréis información sobre las cremas solares para niños, pinchad aquí.




Fuentes: http://aedv.es/wp-content/uploads/2015/04/dossier_campana_cancer_piel_ok.pdf
              https://www.analesdepediatria.org/es-actualizacion-fotoproteccion-infantil-articulo-S1695403309003683

No hay comentarios:

Publicar un comentario